miércoles, 7 de marzo de 2012








domingo, 19 de febrero de 2012






miércoles, 7 de diciembre de 2011


acrilico 1.20 x 1 mts


acrilico 90 x 60 cms.



acrilico 1.30 x 1.10 mts


acrilico 1.10 x 0.90 mts


acrilico 1.20 x 1 mts.

miércoles, 5 de octubre de 2011

las ultimas de la semana.




acrilicos sobre tabla, 1.4 x 1.1 mts.

miércoles, 12 de enero de 2011

Desobediencia : Aproximaciones de un ventrílocuo.-

Ya esta disponible mi nuevo libro en www.lulu.com.
Formato impreso y formato ebook.

http://www.lulu.com/product/tapa-blanda/desobediencia-(aproximaciones-de-un-ventr%C3%ADlocuo)/14458690

viernes, 1 de octubre de 2010


acrilico, 1.55 x 1.55 mts.

viernes, 10 de septiembre de 2010


1 x 1.20

martes, 3 de agosto de 2010

la hernia pintora


1.20 x 1

domingo, 1 de agosto de 2010


1.20 x 1, acrilico

sábado, 26 de junio de 2010


1 x 1.20 mts.

viernes, 21 de mayo de 2010






1 x 1.20

domingo, 21 de marzo de 2010


95 x 95, acrilico, tela

sábado, 20 de marzo de 2010


acrilico 1 x 1.20

domingo, 14 de marzo de 2010


acrilico, 1.20 x 1

sábado, 13 de marzo de 2010


acrilico 1.20 x 1.50 mts.


acrilico 1.50 x 0.70 mts.

jueves, 4 de febrero de 2010


100 x 150 cm. tela acrilico

domingo, 27 de diciembre de 2009

papel 35 x 70


papel 70 x 100

viernes, 25 de diciembre de 2009



1.1 x 1.4 mts

sábado, 12 de diciembre de 2009


1.30 x 1.30 ts.

lunes, 30 de noviembre de 2009

Gracias Paulina


Hacia meses que no pintaba nada.
He vuelto y debo agradecerle a mi entrañable amiga Paulina por sus insultos e improperios, los mismos que me motivaron a reincidir y comprender:
Que mientras exista al menos una persona en el mundo que odie lo que hago, sin duda, lo seguiré haciendo.

Acrilico sobre papel, 70 x 100 cm.

martes, 4 de agosto de 2009

watercolor






acuarelas y birome sobre papel, 35 x 50 cm.

martes, 21 de julio de 2009


tela 80 x 100 cm.

domingo, 5 de julio de 2009

Sangre

Estoy siendo analizado en un laboratorio.
Mi sangre posee los anticuerpos para todas las enfermedades, y en suma, la genética de las que aun no sucedieron sobre la faz de la tierra y también están en mí.
Soy inmortal.
Un gen de mi sangre no me dejaría morir jamás.
Soy inmortal…es una gran decisión.
Siempre creí que daría la vida por mi hijo y mi familia.
La medicina en estos días permitiría tomar de mi sangre la información necesaria para desarrollar una vacuna que garantice la inmortalidad y la cura de todas las enfermedades presentes y futuras.
Para crearla, yo debo morir.
Decidir no será fácil. Hablaré con mi esposa, mi familia y tomaré una determinación.
Morir para que todos vivan. Rescatar. Evitar al mundo el sufrimiento.
¡No confío en tu Institución!
¡Ni en tu política!
Aborrezco tu naturaleza y mi odio no tiene fin y no voy a permitir que de mi hagas vacunas sin antes labrar una lista de personas con absoluta prioridad para recibirla.
Esa es mi condición.
Me llevaría tres años escribir los nombres de quienes vivirán primero con mi muerte luego de que aceptaran mi contrato.
Mi hijo, mi esposa, mi familia, luego amigos, primos, tíos... Así comenzó la suma que terminó en cuatro mil vidas de nombre y apellido que escribí en mi último ensayo sin borrones, ni tachas, sin arrepentimiento ni juicio ni condición.
No olvidé a nadie, aunque casi todos ellos me olvidaron o no saben quién soy.
Esa fue mi lista, la de la historia que no tuve y jamás escribí.
No dormí las últimas cinco noches.
Fui atropellado inesperadamente, luego muerto y desaparecido el día en que debía entregarla…

Ahora no salvo. Mi lista se borra. Lograron la vacuna. Se vende, se multiplica, se goza.
Hicieron negocios con migo en todo el mundo y no pude apelar.
Vendieron mi vida a todos pero los míos jamás compraron.
Mi sangre es toda la sangre menos la de quienes me amaron.

domingo, 31 de mayo de 2009








3 papeles 3 - 70 x 50 cm. acrilico

jueves, 28 de mayo de 2009

inevitablemente

El departamento del sol tiene en su interior un río ancho.
Yo vi a los flamencos ir y venir con ese andar gracioso, tan largo, tan pausado y gentil.
El departamento del sol esta entre el 17 y 23 y aunque nunca fui, se que anda por ahí.
En la terraza tiene un mantel, a cuadros bordo que tejió el propio sol.
Los hizo de barro y los fundió.
Parado allí y a través de las antenas grises se puede ver el cielo cualquier día.
Forman una enredadera, una de líneas rectas y alumínicas y son la geometría del la historia toda.
Por cada bracito de antena se anuda con soga un cajón.
De blanca madera y rustica por cada bracito pendiente un cajón que gira.
Todos giran, lo hacen muy lento y en ambas direcciones como un sordo concierto ausente del tiempo no cambian con él y aun hoy son tan blancos, tan rústicos y opacos como cuando los vi.
Sospecho que atraen palomas...
Si miro hacia abajo veo un manantial que no tiene agua pero se mueve como tal.
Su luz celeste se arrima hasta aquí, evade las piedras que forman el pilar sosteniendo tamaña estructura...
En la terraza del edificio del departamento del sol, un conjunto innumerable de grises antenas, sostienen cajitas que giran en opuestas direcciones pero se alinean cuando llego yo.
De ellas cuelgan racimos de fruta, de mil variedades de fruta en tonos rojo, violeta y amarillo.
Las rojas llevan cables de acero que llegan hasta un condensador, similar a un tanque australiano colgado del sitio alto en donde ya no se ven las antenas, allá muy arriba cerca del farol.
En cambio, las violetas y amarillas, como resortes de miel se comportan flexibles y cambian de color cuando cesa el viento.
No llevan a ningún lugar pero las ilumina siempre el farol.
Nada es muy convencional en la terraza del centro donde esta el edificio en que vive el sol.
Estoy casi seguro de haber visto, soldados en plata mil rayos de bicicleta formando una rueda gigante junto a un capacitor.
La estructura vive sola, se alimenta de si misma pero no se come, no se gasta ni se deteriora.
Muy rápido y en el interior de la rueda, un perro desmesuradamente grande y sin patas, se arrastra como puede haciendo girar el emblema de la continuidad.
De costado y mas abajo, no se oye el ruido del agua que falta en el manantial pero sobre él, y empotrado en la piedra, sube hasta aquí, una columna tan sólida como azul, similar a un obelisco pero en madera que posee branquias como balcones y respira.
Por cada balcón también hay una ventana, y en cada una de ellas cortinas de seda rosa pero no se agitan porque el viento se queda de juerga en las escaleras.
¡Que no llevan a ningún sitio!¡Que se cruzan por donde miro y si conversasen entre si, todo seria pura contradicción!
Yo quise llegar, hace ya 200 años al extremo de la torre y el aire me faltó.
Subí cientos de pisos durante más de una década y tuve que bajar.
Pero si llegue hasta los jardines de naranjos y planté sandias.
Esa noche, así como las anteriores e infinitas, dormí bajo el ombú que había frente a la puerta principal del palacio.
Distinto a lo demás, en el interior del palacio el oro formaba el arcón que atesoraba un grupito de clavos y arena.
Para cuando volví, contraria a mi anterior suerte, llegarme a la terraza me tomo un corto tiempo.
Bajé a gran velocidad deslizándome en la cola de un reptil labrado en mármol que nunca vivió.
Frené con el talón desbaratando un trozo de piedra que en el silencio absoluto de mi torpeza rodó acabando el recorrido y calló.
Sacudí mi ropa de pie y asomándome en la grieta celeste la escuche golpear en el fondo distante.
Entonces el cielo se abrió en los extremos que cerraron el centro con un estruendo ensordecedor.
Luego todo fue naranja y luminoso y en mi retina la imagen se cristalizó de contraste y enceguecí.
Desde lo profundo crujió el pilar del Gigante y fue tan grabe su sonido que también se quebró.
Hacia su costado vi la Suma De Los Elementos caer y en el aire un zumbido feroz deteniendo la luz que irradiaban las cosas justo frente a mis ojos paralizando el resto.
Tan ilustremente caía El Coloso como puede ser la compresión de tal y en el segmento último de Lo Desconocido la fricción del viento incendiando materia dejaba estela a su paso como un cometa.
Mientras el pánico del mundo miraba iluminarse el cielo y las ciudades enteras se volvían pasado… en mí, el conocimiento hizo del miedo desconcierto.
La caída del Gigante súbitamente paró...
Su extremo dió con la Luna salvando a la Tierra, con la Luna que desplazó de su orbita e incendió.

domingo, 24 de mayo de 2009

mmmmm.......masomierda


Tela de 1 x 1.20 mts.